El cuento de nunca acabar

El Madrid vuelve a pagar sus propios errores y esto se está convirtiendo en el cuento de nunca acabar. El planteamiento de Mourinho pudo ser criticable otros dias. Hoy no, sin duda. Las bajas de Arbeloa, Khedira y Di María dejaban abierto un abanico de posibilidades que obligaba a llenar el centro del campo y utilizar jugadores menos habituales. Carvalho llevaba tiempo entrenando, aunque su titularidad deja en una situación complicada a Albiol. Varane es demasiado joven para un partido de estas características.

El planteamiento fue idéntico a la ida de las pasadas semifinales de Champions. Aunque quizá, por unos momentos, el Madrid fuera aquel Inter de Milan agazapado con el avión en el Camp Nou. A pesar de todo lo hablado y la indignación que hay en parte de la afición del Madrid -esa que se va 15 minutos antes de que se terminen los partidos, eso es de mal aficionado- es preciso puntualizar muchas cosas.

1) El nivel físico del Madrid, a estas alturas de la temporada, es pobre. No se puede plantear un partido con una línea de presión ofensiva tan atrás. Es un suicidio. Hay equipos que sí saben juntar dos líneas de 5 jugadores, pero no era el momento y el lugar para hacerlo. La baja de Di María, el hombre fundamental en esa faceta, disminuye cualquier posibilidad de ello. Hay equipos con mil limitaciones futbolísticas. Pero ese defecto lo cubren con sacrificio, gran preparación física y una buena salida del balón. El Madrid carece en estos momentos de las dos últimas.

2) Problemas en la salida del balón. Evidentemente, esto es causa del gran arma de la Farsa: la presión infernal que realizan sus jugadores cuando no tienen la posesión del balón. El despliegue físico es absolutamente descomunal, coordinado y eficaz. También hay cierta complacencia arbitral, sobre todo cuando Busquets corta siempre los contragolpes con una falta táctica. Esa acción casi nunca es sancionada. Y el problema lo tiene el Madrid; se encuentra en una situacion donde el mejor jugador en esa faceta, Xabi Alonso, no le da tiempo a distribuir con rapidez el balón. No digamos ya Altintop, Ramos o Carvalho. Y si hablamos de Casillas para esa función, apaga y vámonos.

El portero recibió pitos del Bernabéu tras el enésimo balón regalado al Barcelona. Que rápido se pasa del halago a la critica en este país y en esta afición del Bernabeu, que como dije ayer, tambien debe jugar y ayer hubo momentos que lo hizo en contra con acciones como estas.

3) Errores evitables. Los dos goles del Barcelona son errores blancos. De patio de colegio. El primero es un grave fallo de marcaje de Pepe que se queda mirando a la grada, mientras que en el segundo, Altintop pierde la referencia de su marcaje. Tampoco vamos a negarle mérito a Messi en el pase, claro.

4) Cristiano Ronaldo. El portugués es un madridista más. El gesto que tuvo en Mallorca, ignoro si por orden de Mourinho, de ayudar en defensa, ha sido el acicate necesario para su redención. No le salían las cosas en ataque, ni mucho menos, pero la actitud de Cristiano Ronaldo en el partido de hoy es digna del mayor elogio posible. Fue el mejor del Madrid y se pudo ir con un premio mayor si el equipo hubiera tenido más acierto en algún que otro contraataque.

5) El Barcelona y Mourinho. ¿Es posible derrotar a este Barcelona? Claro que sí. El argumento sucio y mezquino que utilizan intoxicadores periolistos desde Madrid es acusar al portugués de animar a sus jugadores al juego sucio, que hay problemas con el vestuario, y un distanciamiento con la afición. Entiendo que muchos vivían mejor con Pellegrini en las ruedas de prensa y con confidentes en el vestuario, pero eso al aficionado le importa poco. La Farsa evoluciona cada temporada; no es aquel conjunto al que se le podia ganar del año glorioso de Mourinho con el Inter. Recordemos que los italianos ganaron esa eliminatoria con Cambiasso, Motta y Zanetti en el centro del campo. 

¿Se puede ganar? Sigue siendo un reto. ¿El único es Mourinho? No lo sé. Lo que sí tengo claro es que Mourinho es el mejor entrenador que puede tener el Real Madrid.

¡¡HALA MADRID!!

Madridistas de Firgas.