El Real Madrid y Cristiano Ronaldo. Indomables. Aunque la
realidad de ese componente provocador, ganador y competitivo han convertido a
Cristiano Ronaldo en un jugador completísimo. Sus declaraciones al terminar el
partido son el hat-trick de su paso por Barcelona. El portugués y Varane,
claves en el pase del equipo a la final de la Copa del Rey. El Farsa fue un
juguete en las manos de un conjunto de Mourinho que desquició al Barcelona una
vez más en el Campo Nuevo para dejarlo sin final.
Manchester, Manchester, Manchester. Ese nombre es el que
resuena en la cabeza de la plantilla del Real Madrid y de todo el madridismo.
Pero la exhibición de marcando tres goles en la cuadra culé y reduciendo al extremo
todas las cualidades del Farsa son motivo de alegría y celebración. La victoria
es mérito únicamente de unos jugadores incapaces de ganar al Granada y sufrir
ante el Deportivo; el entrenador es un mero elemento mientras se autogestiona
el equipo. Es imposible que el conjunto de Mourinho haya perdido sólo un
partido de los últimos siete clásicos frente al mejor Barcelona de siempre. No
puede ser cierto. Que no coño, que tiene que haber una cámara oculta. Por eso
suenan Laudrup, Ancelotti y Wenger. Ellos poseen la fórmula mágica para frenar
a Messi y ganar muchos títulos. Deberían preguntarle a un chaval francés de 19
años. Jajajajaja me descojono y me meo ante los que dicen eso. Tenemos un
grandioso equipo y Mou es nuestro general (aunque en Liga nos hemos tocado los ‘timbales’
demasiado)
Tácticamente impoluto, la eliminatoria se puso de cara
gracias a un formidable Cristiano. Piqué, desbordado, se quejaba por una pena
máxima de manual que transformó el portugués. El central del Barça imitó luego en
los saques de esquina a Dwight Howard, jugador de los Lakers, en la práctica de
bloqueos y pantallas al más puro estilo NBA. Mientras Cesc y Jordi Alba pedían
justicia por la ausencia de presencia española en los Oscars, Cristiano seguía
desquiciando a la defensa blaugrana. El Madrid se perdía en las botas de unos
desafortunados Higuaín y Di María en la parte ofensiva. Sin embargo, el
'fideo', ayudó en las subidas de Alba y permitió que Arbeloa fijara mejor la
marca individual sobre Iniesta. Sin noticias de Messi, escoltado por la sombra
de un imperial Varane.
¡¡HALA MADRID!!
Madridistas de Firgas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario