En un partido en el que no había nada en juego por nuestra
parte, uno de los puntos de interés ayer se encontraba en el doble pivote
Khedira-Modric, encargado de llevar la manija en el medio. Sinceramente, tenía
muchas ganas de ver un partido completo de esta pareja (actuaron juntos como
únicos mediocentros 57’ ante el Depor y 28’ ante el Bilbao) y creo que no
decepcionó. Con el pasar de los minutos el juego se fue diluyendo, cierto, pero
en la parte que estuvimos a tope, pudo verse que el funcionamiento de estos dos
jugadores al unísono es solvente. Ahora Xabi está en buen momento, pero existe
un sensato temor ante otro posible bajón, y sus alternativas son tema frecuente
de debate. Sobre esto hay opiniones encontradas, para algunos Modric es un
mediapunta, para otros un mediocentro. Yo lo veo más cerca de la segunda
opción. Sin ser específicamente un mediocampista(su juego es bastante distinto
a lo que puede dar X. Alonso, aunque sus pases sean parecidos) creo que su
talento queda mejor explotado cocinando la jugada desde el medio que rondando
el área rival. Ya escribí en su momento que podía ser nuestro nuevo Sneijder
(sobre todo el de la primera temporada, o el del Inter de Mou). Sobre si lo que
tenemos será suficiente para lo que necesita un centro del campo poderoso de un
campeón europeo, el tiempo lo dirá.
El primer tiempo fue casi una repetición de los últimos partidos
entre Ajax y Real Madrid. El conjunto holandés se ha convertido en nuestro
particular Atlético europeo, ya que en los seis partidos disputados en estas
últimas tres temporadas, el arrollador balance ha sido de seis victorias
blancas, veinte goles a favor y dos en contra. Además de la lógica autoridad
madridista, nos solemos encontrar con un conjunto que no es consciente de su
inferioridad y que intenta jugar en Europa como lo hace en la liga de Holanda.
Presionan muy arriba, tocan mucho el balón y se llevan goles de todos los
colores. Pero bueno, al menos se han clasificado para la UEFA (que en este
grupo estaba caro, ojo) así que en el fondo igual les compensa. El caso es que
a poco que apretábamos el acelerador creábamos situaciones de gol prácticamente
de la nada. En los primeros 10’ Benzema (gol bien anulado) y Coentrao (al palo)
pudieron abrir el marcador. Pero el gol inaugural no tardaría mucho en llegar:
A los 13’, el primero de los soberbios pases largos de Modric tuvo como
destinatario a Benzema, que recogió el suave envío, se escoró hacia un costado
y cedió para que Ronaldo marcara a puerta vacía. Lo que también fue remarcable
en la jugada es que nació en una notable acción defensiva de Modric, con
recuperación de balón en medio campo. En el minuto 28 llegaría el segundo gol,
esta vez con asistencia a contabilizar para el croata, en una fotocopia del pase
anterior, con Callejón y su definición machacona como destinatario. El primer tiempo
terminaba con alguna ocasión clara más, bien solventada por el portero Vermeer,
y sin ningún acercamiento de peligro del equipo rival.
Para la segunda parte no se realizó ninguna sustitución aparte
de la entrada de Pepe, en la primera, por lesión de Coentrao (que obligó a
Varane a pasar a la derecha y a Nacho a la izquierda). Esperemos que el lateral
se recupere pronto, porque ya lo pasamos bastante mal durante unos cuantos
partidos al vernos mal en esa posición. A los 4’ de la reanudación, Kaká hacía
el tres a cero en gran disparo curvado marca de la casa. Un síntoma de la
decadencia de este aristocrático rival son las grandes exhibiciones que ha dado
el brasileño ante ellos. Si decidiera terminar su carrera en Holanda (como en
su día hiciese Laudrup), sabemos que allí marcaría diferencias, pero me imagino
que al brasileño le tirarán más los dólares. A partir de aquí, como bien
explicó Mourinho en sala de prensa, empezamos a partirnos, quizá por las ganas
de conseguir más goles o quizá por relajación, pasando a atacar con seis
hombres y defender con cuatro. A consecuencia de esto el Ajax se rehizo, ‘deleitándonos’
con interminables toques de balón carentes de profundidad. Su dominio en este
tramo se vio premiado con un gol, aprovechando una salida a destiempo de Adán.
Para solucionar los problemas se dio entrada a José
Rodríguez, en sustitución de Kaká, quedando el equipo más cohesionado. Así, el
tramo final del partido fue otra vez nuestro. Morata, que entró por Benzema,
volvió a mostrar que es un delantero con predilección por el pase sobre el gol.
Fabricó el 4-1 en jugada desde la derecha con centro a la cabeza de Callejón y
falló poco después el quinto al quedarse sin ideas delante del portero. La
anécdota la puso el asunto del brazalete de capitán. Como todos sabemos, en el
Madrid los capitanes siguen una estricta línea sucesoria de antigüedad en el primer
equipo. Así, Kaká (2009) fue el portador al inicio, y en su sustición, debía
corresponderle a Pepe (2007) que no lo llevaba al principio lógicamente por no
haber sido titular. Adán (2010) aprovechó la confusión para colocárselo unos
minutos, pero la clara advertencia del entrenador le hizo entregárselo a su
legítimo dueño, que no era otro que el defensa portugués. ¡Se diría que
Mourinho, quien vive día y noche obsesionado con destruir el señorío y los
valores del Madrid, parece muy preocupado en que se respeten sus tradiciones!
Aparte de Modric, figura indiscutible del partido, aunque
sólo le validásemos su primera mitad, destaco el buen hacer de Callejón. Su
eficacia de cara a gol es asombrosa, es un jugador que no tiene dudas, vertical
y directo siempre. Un ejemplo claro de esto es que ha marcado los mismos goles
(7) que Higuaín, sin ser un nueve, en Liga de Campeones habiendo jugado 33
partidos menos. Kaká también jugó un partido bastante aceptable, lo mismo que
Benzema, quien no encontró el gol pese a sus habituales buenos movimientos.
Sobre Cristiano, su cruz estuvo en una amonestación innecesaria que se ganó a
poco del final. Evidentemente es humano y tiene derecho a cometer errores, pero
un jugador que acumula tantos minutos está expuesto a que pasen estas cosas. A
veces echo de menos que se le reserve un poquito, sobre todo en partidos sin
nada en juego. En cuanto al resto, quizá sea por el baile de posiciones, pero
sigue sin convencerme Nacho. Varane cumplió en el puesto de dos, extraño para
él, mientras que Adán sigue demostrando que no es competencia seria ni real
para Casillas. Un equipo top debe tener al menos dos porteros de garantías; por
ejemplo, ayer en el Málaga Pellegrini reservó a Caballero (que quizá sea ahora
mismo el mejor portero de la Liga) y dio la titularidad a Kameni, que salvó el
empate de su equipo con hasta cinco paradas espectaculares. Si el Málaga puede
permitírselo, ¿por qué el Madrid no?
¡¡HALA MADRID!!
Madridistas de Firgas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario